Guerra comercial China-Estados Unidos: ¿es hora de un acuerdo?

La guerra comercial China-Estados Unidos debe llegar a un acuerdo en estos momentos. Esto podría detener el descalabro económico que azota al mundo.

El acuerdo, para frenar la guerra comercial entre China-Estados Unidos, se basa en que las dos mayores potencias económicas del planeta pueden generar una dinámica que alivie la crisis.

Esta crisis, que es a nivel global, últimamente crece como un tsunami financiero y político.

Las cifras del Banco Mundial advierten, que el crecimiento mundial colapsará del 5,5% en 2021 a solo el 2,9% en 2022.

China se vería afectada también por el colapso, pues, registró una expansión del 0,4% en el segundo trimestre frente a casi el 5% en el primero.

Por su parte, EE.UU., que se contrajo un 1,6% en el primer trimestre, alcanzaría este año solo un 2,6%, más de tres puntos, por debajo del 5,7% de 2021.

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El presidente del Banco Mundial, David Malpass, alertó: «La guerra en Ucrania, los cierres en China, las interrupciones en la cadena de suministro y el riesgo de estanflación están afectando el crecimiento».

En este sentido, Malpass advierte que «para muchos países, será difícil evitar la recesión».

Movimientos en la geopolítica afectan

Mucho antes de la pandemia, ya se trató que ambas potencias lograran un acuerdo.

No obstante, este ahora parece más improbable, debido a que China es ahora el adversario principal presente y futuro para la hegemonía norteamericana.

Sin embargo, las movidas que se dan en el tablero de la geopolítica podrían causar algunos efectos.

La pandemia primero, pero adempás, la guerra en Ucrania, generan una conmoción mundial que patea los mapas políticos.

A esto se suma el crecimiento de la ultraderecha de Marinne Le Pen en Francia, la caída del británico Boris Johnson, y la renuncia definitiva de Mario Draghi en Italia.

A estos escenarios, que favorecen a Putin, se les podría sumar la probable derrota de Joe Biden en las elecciones legislativas de noviembre.

Los aranceles impuestos a China

No están claros aún, entre los analistas, los efectos inmediatos que produciría una tregua con China.

Pero hay que tomar en cuenta los dicho por Janet Yelen, ministra de Economía de Biden, sobre los aranceles: «realmente no fueron diseñados para servir a nuestros intereses estratégicos».

Según Bloomberg, esta funcionaria defiende los gravámenes como una palanca de presión contra China al tiempo que pone en duda que sirvan para reducir la inflación.

Pero, para economistas como Larry Hug, responsable del área China en la consultora australiana Macquarie Group, el impacto de los aranceles en la inflación estadounidense «seria limitado».

Conversaciones son una esperanza

Mientras, el South China Morning Post, diario independiente de Hong Kong asegura que «hay destellos de esperanza de un fin de la guerra comercial entre Estados Unidos y China».

El medio asiático indica que funcionarios de Washington y Beijing parecen estar hablando nuevamente.

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Finalmente, en el escenario global, no dudan que la disolución de la guerra comercial China-Estados Unidos, distanciaría el riesgo de recesión y crisis social que amenaza a varios países.

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