Claves de las elecciones intermedias en Estados Unidos
Las claves de las elecciones intermedias en Estados Unidos tienen muchos elementos en juego, hoy se define parte del juego político.
En el caso de la contienda de medio término que se disputa este martes en los Estados Unidos, la frase es real.
Todas las bancas en la cámara de representantes, 35 bancas en el senado y 36 gobernaciones estarán en las boletas electorales.
Según la mayor parte de las encuestas, los estadounidenses irán a las urnas con las siguientes preocupaciones en mente: la economía y la inflación, la confianza en el proceso electoral, la inseguridad y el aborto.
Claves de las elecciones intermedias
Pero, cuáles son las claves de las elecciones intermedias.
Quién controle el Congreso y de quiénes sean electos gobernadores, serán las políticas públicas posibles para enfrentar diversos elementos.
Gobernador con el Congreso a favor es muy diferente en muchos aspectos.
Los índices de aprobación de Joe Biden son históricamente bajos.
Según la última encuesta de Reuter-Ipsos, el 55 por ciento de los estadounidenses desaprueba su gestión.
En esta elección se definirá si los votantes siguen fieles a Trump y sus candidatos protegidos, o si el partido está listo para nuevos emergentes que están pidiendo su lugar.
En la cámara de representantes, sus 435 bancas se ponen en juego, lo que implica que cualquiera de los dos partidos puede quedarse con la mayoría en la cámara baja.
Al momento, los demócratas tienen el control con 221 bancas, contra 212 bancas republicanas.
Se obtiene el control de la cámara con 218 bancas.
Pero según un análisis hecho por la cadena CBS, hay 81 bancas en verdadera disputa, es decir, en las que los dos partidos tienen posibilidades.
Dada la situación hoy, el partido republicano tiene que revertir al menos cinco bancas para que sumadas las dos elecciones especiales (una en Indiana y una en Florida) que se espera resulten en victoria republicana, termine quedándose con la mayoría en la cámara.
Históricamente, en las elecciones de medio término, el partido del presidente en ejercicio pierde el control del Congreso.
Entre las 10 bancas más reñidas en la elección al senado está la de Marco Rubio, senador republicano por Florida.
Si bien esta segunda reelección no le está resultando tan sencilla a Rubio, se espera que al final del día logre la victoria
De las 100 bancas en el senado federal (2 por cada estado), hay 35 en juego en esta elección.
Los demócratas controlan el senado con 48 bancas propias, dos bancas independientes que suelen votar con ellos, y el voto que desempata de la vicepresidente Kamala Harris, quien preside la Cámara alta.
Por lo tanto, para que haya un cambio en el poder, los republicanos deben retener todas sus bancas y revertir al menos una banca actualmente demócrata.
De las 35 en disputa, 21 son bancas actualmente republicanas y 14 demócratas. En la mayoría se presume que no habrá cambios, pero en 10 de las bancas en cuestión hay una dura batalla.
En Arizona, Georgia, Nevada y Wisconsin, las encuestas dan un empate entre los candidatos demócratas y republicanos.
Florida, Carolina del Norte y Ohio se presupone que votarán republicano, mientras que Colorado, Pensilvania y New Hampshire se espera que voten demócrata.
Sobre la elección de gobernadores
En cuanto a los gobernadores, se elegirá en 36 estados más 3 territorios.
Mientras que en 31 de estas contiendas los actuales gobernadores están buscando la reelección.
En algunos casos, como Florida, la elección es casi cantada, porque se estima que Ron DeSantis será reelecto con facilidad.
Una elección reñida será Oregon.
La situación luce complicada para los demócratas, pese a que este partido ha controlado el estado desde el 1982.
Mientras el voto demócrata probablemente se divida entre Kotek y un ex demócrata moderada que ahora se lanzó como independiente, Betsy Johnson, la candidata republicana, Christine Drazan pisa cada vez más fuerte.
Las encuestas dan una leve ventaja a Drazan, dentro del margen de error.
En Michigan, si bien la gobernadora demócrata Gretchen Whitmer siempre ha sido popular, la republicana Tudor Dixon ha logrado cautivar a gran parte de los votantes, y todo puede pasar.
En Oklahoma, un estado tradicionalmente republicano, el actual gobernador Kevin Stitt tiene una fuerte contendiente en Joy Hofmeister, una ex republicana ahora inscripta como demócrata que le está disputando la gobernación.
Por último, en Nueva York, la situación también es de final abierto. Andrew Cuomo llegó a sonar como posible candidato a la presidencia cuando se convirtió en la cara de la lucha contra el COVID-19.
Pero luego llegó el escándalo de los abusos sexuales y se vio obligado a renunciar.
En su lugar quedó la vicegobernadora Kathy Hochul. Hochul busca ahora una reelección, y si bien es popular, nadie se atreve a afirmar que le ganará al candidato republicano Lee Zeldin.