Mató a su amigo por celos: En Lamont, California
Un sujeto admitió que mató a su amigo por celos luego que sospechara de una aventura de su pareja con la víctima del hecho.
El acusado, luego de los hechos en Lamont, California, dijo que mató a golpes a su compañero de trabajo porque creía que el colega estaba teniendo una aventura con su esposa, según un informe.
José Gutiérrez-Rosales, de 49 años, supuestamente golpeó a Héctor Javier Castañeda Vásquez, de 56 años, con una tubería de riego.
Los hechos fueron mientras los dos trabajaban juntos el 18 de abril, según detalles sobre el asesinato que se revelaron esta semana.
“Estábamos allí recogiendo las tuberías”, dijo a los investigadores del alguacil del condado de Kern, según KGET, citando documentos judiciales.
“Comí como dos tacos, y sentí mi cuerpo como extraño, y luego, de repente, agarré la pipa y comencé a atacarlo”.
“Esto es por involucrarme con mi familia”, dijo Gutiérrez-Rosales que le expresó a Vásquez mientras seguía golpeándolo.
La víctima fue declarada muerta en la escena.
Sufrió fracturas faciales y cortes en la cara y la parte posterior de la cabeza. Varios de los dientes de Vásquez también fueron eliminados.
Gutiérrez-Rosales afirmó que sus compañeros de trabajo se burlaron de él por la supuesta aventura antes de que llevara a cabo el ataque.
Como defensa expresó que “ellos provocaron todo esto”.
Pero no está claro si estaba casado, según los documentos judiciales.
Una mujer no identificada les dijo a las autoridades que ella y los Gutiérrez-Rosales tenían una relación de tres meses.
Además, la testigo mencionó que tenía problemas de ira.
Arrestado el 18 de abril
Testigos y compañeros de trabajo señalaron a Gutiérrez-Rosales como el asesino y fue arrestado el 28 de abril.
Los agentes del alguacil del condado de Kern fueron llamados a la cuadra 13600 de Di Giorgio Road alrededor de las 10:30 am del 18 de abril donde estaba el cuerpo.
Hoy enfrenta acusaciones por asesinato en primer grado, según KGET.
Después de la muerte de Vásquez, Gutiérrez huyó en su automóvil, pero finalmente abandonó el vehículo y comenzó a caminar hacia Bakersfield.
Le pidió perdón a Dios y comenzó a cortarse con un cúter.
Dijo a los investigadores que, si hubiera querido huir, habría escapado a México.
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