Benjamín Arellano Félix pidió medida humanitaria
Benjamín Arellano Félix estaría pidiendo su liberación anticipada por razones humanitarias según revelaron algunas fuentes.
Benjamín, quien fuera el líder del cartel de los Félix Arrellano, pedirá a las autoridades de los Estados Unidos su liberación anticipada.
La razón: “por compasión y razones humanitarias”.
El cártel de los Arellano Félix (CAF o Cártel de Tijuana) fue uno de los más temidos en su momento.
“El Mín”, como le decían sus hermanos, cumple una sentencia que termina hasta el año 2033 por cargos de delincuencia organizada.
“Tuvimos acceso al expediente que revela que desde el pasado 26 de abril de este año interpuso una petición para que se lleve a cabo una audiencia donde pedirá ser liberado antes de tiempo, de hecho, de manera inmediata”.
La periodista Laura Sánchez Ley, encargada de dar a conocer la noticia, que ya fue publicada en el periódico Milenio, especificó la información.
El exlíder del cártel de los Arellano Félix interpuso la petición para efectuar una audiencia donde solicitará ser liberado antes de tiempo.
Cabe mencionar que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos clasificó el documento como “reservado”, pero en un resumen se revela que el reo y su defensa buscarán (por el apartado 18 mil 3582 del código legal) que el juez reconsidere que la cárcel no es un medio adecuado para promover la rehabilitación o por “razones extraordinarias y de peso justificado”.
Benjamín Arellano Félix fue el líder
Benjamín Arellano Félix fue detenido en el año 2002, en México, luego fue extraditado a los Estados Unidos.
En el año 2012, las autoridades estadounidenses lo condenaron a 25 años de prisión, tras una negociación que incluyó $100,000,000 de dólares.
Recordar que el resto de los hermanos lo relevaron para conservar el liderazgo de la organización.
Benjamín Arellano Félix dirigió el Cartel de Tijuana con sus hermanos hasta su arresto en marzo de 2002.
Benjamín fue extraditado a los Estados Unidos el 29 de abril de 2011 para enfrentar cargos de tráfico de cocaína a California.
El 4 de enero de 2012 se declaró culpable de extorsión y conspiración para lavar dinero y fue sentenciado a 25 años de prisión el 2 de abril de 2012.
Algunos objetos que le fueron decomisados durante sus detenciones se exhiben en el Museo del Enervante en la Ciudad de México.
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