Secuestrada por un hombre que conoció por Instagram
Una joven, de 17 años secuestrada por un hombre que conoció por Instagram, en California logró reencontrarse con su familia en Rialto, California. El hecho se registró en Nueva York que había conocido a través de la red social.
La adolescente fue reportada como desaparecida el 30 de abril y el caso fue asignado a la detective Agnes Watson el 2 de mayo, informó la policía de Rialto. De inmediato la agente fue a la “escuela y una de sus mejores amigas me dijo que había conocido a alguien por Instagram”, aseguró Watson.
Una conversación que condujo al rapto
La estudiante además dijo que la había visto «conversando en línea, que estaba guardando secretos y que la había visto hablando por el chat interno de Instagram».
Fue entonces cuando la detective pidió un listado de las últimas llamadas de la adolescente y allí encontró un número de teléfono de Nueva York.
“Llamé y un hombre contestó, me identifiqué como la detective Watson, él colgó y yo le escribí: “Soy la detective Watson, por favor llámame”, dijo la detective.
Más adelante Watson recibió un mensaje de texto que provenía «del teléfono del sospechoso. Era un mensaje de texto de la víctima que pedía ‘por favor, ayúdenme. No me dejará ir. Quiero volver a casa. Por favor, llévenme de vuelta a casa'». Y luego me dijo ‘no respondas a este mensaje de texto o me meteré en problemas'».
La detective logró localizar el teléfono en una dirección de la ciudad de la costa este. Con la ayuda de la policía de Nueva York se encontró al sospechoso quien fue identificado como Elijah Clark, de 24 años.
«Las autoridades de Nueva York me dijeron que usaron la fuerza para entrar en su casa y la menor estaba allí. Ellos la rescataron, estaba secuestrada, y que arrestaron al sospechoso bajo numerosos cargos», dijo Watson.
Regresó el día de la madre
La menor se reunió con su familia el día de la madre. Los padres «me enviaron fotos con la menor y me dijeron que les había dado el mejor día de la madre», cuenta Watson.
«Cuando nos dijo que la habían encontrado, se me cayó el corazón. Los dos estábamos tan eufóricos, con lágrimas de alegría», dijo el señor Patterson, padre de la víctima.
Por su parte, la señora Ramírez dijo que fueron días llenos de angustia «es más fácil manipularlos por redes sociales, nosotros no tuvimos eso, pero es increíble».
